domingo, 12 de enero de 2020

Momentos


Nunca terminamos de encontrarnos en el mismo punto, en la misma idea, en el mismo contexto. Lo ideal. Una balanza, que se balancee siempre al mismo ritmo, a veces lento otras tantas veloz.
Cuando yo buscaba un refugio entre tanta imaginación, tus sentidos volaban en otros cuerpos, en otro espacio. Y tú, te revolvías cada vez que no me encontrabas, pero jamás declinabas ante los deseos.
Además, siempre tendrás lo que los demás perciban de ti. Quizás tú tengas visiones distintas, pero ellos las cambian para formar una revolución. La revolución que se forma en el amor, que se formó en tus ojos. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario