Recuperar el deseo de no volver a
tenerte. Sentir el respeto y la actitud de cuidarte en los momentos de malestar
emocional.
Si queremos cantar, nos salen alas
para volar, para soñar. Cortarlas sería el delito por excelencia.
Sin mucho sentido, un mundo
incoherente, sin conexión, sin realidad. Reencontrarnos. Leernos, corregirnos,
comprobarnos, recordarnos. Maravillosa mirada. Incalculable valor. Quiero
hacerte soñar, con mucho cariño y corazón. No hay motivos ni razones para
perdernos y no volver a necesitarnos.