Sigiloso el tiempo transcurre, mientras estudiamos nuestras
vidas. Aun tengo esa sensación de no haberlo disfrutado lo suficiente. Calman
los besos el temblor de los huesos. Solo cuando ya ha descubierto el final. A
medias, sin valor. Meses, semanas, días, horas. Escribiendo para que vayas más
rápido. Luego te arrepientes. No hay vuelta atrás. Ni los segundos antes de
darle al botón, ni los segundos antes de sus labios. ¿Cómo has llegado hasta
aquí? Una eternidad, un instante, un pequeño descuido, un recuerdo, una
ensoñación, un deseo. Rosas con azúcar. Café con espinas. Recuperarnos.
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